Lo dijo en la noche de su triunfo electoral. Pero su gobierno propuso un incremento de 27,3% en la tasa de servicios urbanos, que hoy aprobaron concejales y mayores contribuyentes.
Con la adrenalina del triunfo electoral, la noche del 25 de octubre del año pasado Carlos Arroyo prometió bajar las tasas. “La idea que ha presidido nuestro proyecto lejos de aumentar es la de bajar las tasas”, dijo el por entonces intendente electo.
Si bien durante la transición el propio José Cano, hoy secretario de Economía y Hacienda, aclaró que la intención no era bajar las tasas sino subirlas por debajo de la inflación, los hechos terminaron desmintiendo la promesa pública de Arroyo.
El gobierno municipal propuso un incremento en la tasa de servicios urbanos de 27,3%, que la asamblea de concejales y mayores contribuyentes aprobó esta mañana. Otros tributos tendrán, a pedido de la oposición, un tope de 20%.